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Guías de práctica clínica, ¿por qué?

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¿Qué son las guías de práctica clínica?

«Las guías de práctica clínica son recomendaciones desarrolladas sistemáticamente para ayudar a los profesionales y a los pacientes a tomar decisiones sobre la atención sanitaria adecuada para circunstancias clínicas específicas» – Comité del Instituto de Medicina de EE.UU. para asesorar al Servicio de Salud Pública sobre guías de práctica clínica (1990).

Las guías de práctica clínica ayudan a los pacientes y a los profesionales a tomar decisiones sobre la atención sanitaria. Estas guías no solo describen la atención apropiada, sino también la atención inapropiada o la atención sobre la que la evidencia científica y el consenso son dudosos.

Las guías de práctica clínica deben elaborarse de forma reglada y sistemática, y estar perfectamente documentadas.

Atributos y principios de las guías de práctica clínica

Los atributos de las guías de práctica clínica consideradas de calidad deben ser:

  • Validez: las guías de práctica clínica se consideran válidas si, cuando se siguen, conducen a los resultados sanitarios y de costes previstos para ellas.
  • Fiabilidad/reproducibilidad: las guías de práctica clínica son fiables y reproducibles si con las mismas pruebas y métodos utilizados para el desarrollo de las mismas otro grupo de expertos llegaría a las mismas recomendaciones, y si bajo las mismas circunstancias clínicas las recomendaciones son interpretadas y aplicadas de forma consistente por los distintos profesionales sanitarios.
  • Aplicabilidad clínica: las guías de práctica clínica deben desarrollarse para abarcar una población de pacientes lo más amplia posible, acorde con los conocimientos sobre los factores clínicos y sociodemográficos relevantes al tema en estudio.
  • Flexibilidad clínica: las guías de práctica clínica deben identificar las excepciones a sus recomendaciones. El objetivo es permitir el margen de maniobra necesario para el juicio clínico y las preferencias del paciente.
  • Claridad: las guías de práctica clínica deben utilizar un lenguaje inequívoco, definir los términos con precisión y utilizar modos de presentación fáciles de seguir.
  • Proceso multidisciplinar: las guías de práctica clínica deben elaborarse mediante un proceso que incluya la participación de representantes de los principales grupos interesados.
  • Revisión programada: las guías de práctica clínica deben incluir información sobre cuándo deben ser revisadas, teniendo presente las nuevas pruebas clínicas o los cambios en el consenso profesional.
  • Documentación: los procedimientos seguidos en la elaboración de las guías de práctica clínica deben documentarse minuciosamente.

La selección de los atributos de las guías de práctica clínica se basa en cuatro principios:

  • Claridad en la definición de cada atributo.
  • Compatibilidad de cada atributo y su definición con los usos dados por los profesionales sanitarios.
  • Razones o justificaciones claras para la selección de cada atributo.
  • Sensibilidad a las cuestiones prácticas al utilizar los atributos para evaluar conjuntos de guías prácticas.

Beneficios de las guías de práctica clínica

Son muchos los beneficios atribuibles a las guías de práctica clínica, pero a modo de resumen los podemos clasificar en ocho:

  • Mejoran los resultados clínicos de los pacientes.
  • Reducen la variabilidad de la práctica clínica. Esto se traduce en que los profesionales de una disciplina sanitaria determinada trabajan de la misma manera, llevando a cabo las intervenciones o procedimientos que han mostrado mayores beneficios.
  • Permiten a los pacientes tomar decisiones más informadas, ya que los profesionales sanitarios les pueden explicar las diferentes posibilidades con datos en la mano.
  • Mejor relación costo-beneficio.
  • Ayudan a tomar decisiones clínicas de mayor calidad, ya que la práctica se basa en pruebas en lugar del comúnmente mencionado «a mí me funciona».
  • Aumentan la transparencia de la atención sanitaria, al saber en cada momento el procedimiento que se lleva a cabo. Esto se garantiza con la no realización de intervenciones de dudosa valía y que pueden ir en contra de la ética profesional.
  • Aumentan el reconocimiento por parte de otros profesionales sanitarios. El hecho de seguir las recomendaciones de expertos, accesibles a cualquiera que quiera informarse sobre ellas, hace que otros profesionales tomen en serio a los que siguen las guías de práctica clínica, al considerarse la mejor forma de actuar a nivel mundial.
Las ventajas de las guías de práctica clínica

Guías de práctica clínica para fisioterapeutas

A continuación te dejamos los enlaces a nuestros repositorios de guías de práctica clínica, que ya están ayudando a muchos fisioterapeutas en su día a día:

Guías de práctica clínica de traumatología y ortopedia

Guías de práctica clínica de respiratorio y cardiovascular

Guías de práctica clínica de neurología

Guías de práctica clínica de geriatría

Guías de práctica clínica de pediatría

Guías de práctica clínica de reumatología

Guías de práctica clínica de oncología

Guías de práctica clínica de COVID-19

Guías de práctica clínica de Fisioterapia digital

Referencias

– Institute of Medicine (US) Committee to Advise the Public Health Service on Clinical Practice Guidelines, Field, M. J., & Lohr, K. N. (Eds.). (1990). Clinical Practice Guidelines: Directions for a New Program. National Academies Press (US).

– Woolf SH, Grol R, Hutchinson A, Eccles M, Grimshaw J. Clinical guidelines: potential benefits, limitations, and harms of clinical guidelines. BMJ. 1999;318(7182):527-530. doi:10.1136/bmj.318.7182.527

Foto del autor

Jorge Rodríguez

Fisioterapeuta, Máster en Digital Health (cum laude) en Tallinn University of Technology, Miembro del Health and Care Professions Council (HCPC), Experto en Ejercicio Terapéutico y Experto en Redes Sociales. Creador y editor de lafisioterapia.net y FisioComunidad. Apasionado de la divulgación en Fisioterapia y la promoción de la salud, con especial interés en las herramientas digitales como vía para la mejora de la calidad de vida.